Cuando el Presidente vuela a Nevada para dar un importante discurso sobre la política de Inmigración, la nación se detiene a escuchar. “Sí, rompieron las reglas. Cruzaron la frontera ilegalmente. Tal vez se quedaron más tiempo del permitido en sus visas. Pero estos 11 millones de hombres y mujeres ahora están aquí.” Presidente Barack Obama, 29 de enero de 2013.
¿Por qué dijo esto el Presidente? Porque estaba respondiendo a las reacciones que durante años han venido de voces antiinmigrantes en nuestro país. “No recompensen a los que violan la ley,” dicen. “Pónganlos en un avión y envíenlos a casa para que esperen al final de la fila.” Reacciones inviables que nunca se han basado en el sentido común. 11 millones de personas están aquí ahora sin documentación por una razón u otra. Según la ley actual, si alguien que ha vivido en los Estados Unidos sin documentación intenta regresar a casa para solicitar una visa, sus posibilidades de regresar son muy pequeñas. Y la espera será bastante larga. Esto representa un riesgo para personas que pueden ser padres de hijos ciudadanos estadounidenses o cónyuges de un ciudadano. Así que tenemos un problema. No hay duda. Deportar a todos no es una solución. Quejarse de quienes entraron ilegalmente tampoco es una solución. Es hora de arreglar el problema esta vez y asegurarnos de que nunca tengamos un problema como este de nuevo. Creo que las propuestas del Presidente ofrecen soluciones justas y viables para que las personas indocumentadas se legalicen en este país. Y parece que hay un consenso amplio y creciente para las soluciones que el Presidente busca.
Este año podría ser realmente diferente. 2013 podría, y debería, ser el año en que se adopte una reforma migratoria integral a largo plazo inmigratoria. No se trata solo de amnistía y “regalos.” Se debería exigir a las personas pasar verificaciones de antecedentes. Aquellos con antecedentes criminales deberían ser deportados. Se debería exigir a las personas mostrar prueba de que pagaron impuestos si trabajaron en los Estados Unidos, y por lo tanto se beneficiaron de los servicios proporcionados aquí. Como esta es una nación de habla inglesa, se debería exigir a las personas demostrar que pueden hablar o están aprendiendo a hablar inglés. Y necesitamos saber quién está aquí. Por eso cerrar las fronteras para detener el flujo de cruces fronterizos es un componente esencial. Y un mejor seguimiento de quienes vienen aquí con visas de turista es igualmente esencial.
Nadie sabe realmente cómo será la ley final de Reforma Migratoria Integral. Los detalles están por venir. Pero finalmente estamos escuchando propuestas de sentido común que vienen de Washington para abordar un sistema roto y obsoleto. Para leer más sobre la Reforma Migratoria Integral en 2013,haga clic aquí.