A partir del 20 de agosto, el Departamento de Estado de EE. UU. implementará un nuevo programa de fianzas para visas que requerirá que ciertos solicitantes de visas de visitante B-1 y B-2 paguen fianzas de seguridad de $5,000, $10,000 o $15,000 como condición para la entrada. Este programa se aplica a personas de países señalados por altas tasas de permanencia irregular, controles de seguridad deficientes o preocupaciones sobre prácticas de ciudadanía por inversión.
En The Law Offices of James A. Welcome, queremos que las personas y familias de nuestras comunidades entiendan qué significa este programa en términos prácticos. Para muchos, esta nueva política representa más que un obstáculo financiero, añade presión, incertidumbre y una barrera adicional para el viaje legal y la visita familiar.
Representamos a inmigrantes y sus familias en todo Connecticut, incluyendo Waterbury, Danbury, Norwalk, Stamford, Bridgeport y más allá. Nuestro equipo entiende cómo incluso las restricciones temporales de viaje pueden interrumpir vidas. Ya sea que esté tratando de traer a un ser querido a los Estados Unidos para una visita corta o le preocupe cómo su propia solicitud de visa puede verse afectada, la introducción de esta política merece toda su atención.
En este blog, explicamos los detalles del programa piloto de fianzas para visas, exploramos a quién afecta y ofrecemos información sobre cómo responder si su familia se ve impactada.
¿Qué es el Programa Piloto de Fianzas para Visas?
El Programa Piloto de Fianzas para Visas permite a los oficiales consulares de EE. UU. imponer una fianza reembolsable de $5,000, $10,000 o $15,000 a ciertos solicitantes de visa. Estas son personas que solicitan visas B-1 (negocios) o B-2 (turismo). El monto de la fianza es retenido por el gobierno de EE. UU. como garantía de que la persona no excederá el tiempo permitido por su visa.
El programa estará vigente por 12 meses, comenzando el 20 de agosto de 2025, y es parte de un esfuerzo mayor de la administración Trump para aplicar controles migratorios más estrictos, particularmente en respuesta a problemas percibidos de “permanencia irregular”.
¿Quiénes se ven afectados por la política de fianzas para visas?
Esta política no se aplica a todos los viajeros. Se dirige específicamente a personas de países que han sido señalados por:
- Altas tasas de permanencia irregular de visas
- Protocolos inadecuados de revisión o evaluación de seguridad
- Concesión de ciudadanía mediante inversión sin residencia
- Preocupaciones diplomáticas o de política exterior
Estas determinaciones las realiza el Departamento de Estado y pueden actualizarse con el tiempo. Aunque no se ha publicado una lista oficial de países con la política, los países con históricamente altas tasas de permanencia irregular incluyen Haití, Venezuela, República Dominicana, Colombia y Brasil, naciones con grandes poblaciones inmigrantes ya viviendo en EE. UU.
Si usted o su familia planean visitar desde un país que entra en una de estas categorías, esta política podría aplicarse a usted.
¿Por qué son un problema estas fianzas?
Seamos claros: una fianza de $10,000 no es dinero menor para la mayoría de las personas. Para muchas familias, especialmente aquellas que intentan visitar a seres queridos o hacer negocios en EE. UU., esta es una carga financiera aplastante.
Y aunque la fianza es técnicamente reembolsable, el proceso para obtener ese reembolso no está garantizado que sea simple o rápido. Si alguien sale tarde, no reporta ciertos movimientos, o si un oficial consular determina que hubo alguna infracción, ese dinero podría perderse.
Peor aún, muchas familias podrían ni siquiera entender que están sujetas a este requisito hasta que llegan a la embajada para su entrevista de visa. El programa permite total discreción a los oficiales consulares, lo que significa que no hay notificación automática previa.
Más aplicación, menos excepciones
Esta política de fianzas para visas no incluye procesos claros de apelación ni exenciones significativas. La palabra del oficial consular es definitiva, y la capacidad de impugnar estas decisiones es casi inexistente. Por eso el papel de un abogado de inmigración calificado es tan crítico en este momento.
Un abogado puede ayudarle a entender:
- Si esta política podría afectar su caso o su familia
- Cómo prepararse para entrevistas de visa en países de alto riesgo
- Qué documentación necesita para fortalecer su solicitud
- Cómo protegerse de la pérdida de la fianza o problemas legales adicionales
¿Qué hay realmente detrás de la política?
La administración Trump ha hecho de la aplicación de la ley migratoria uno de sus principales objetivos políticos. Este programa de fianzas no es una acción aislada. Surge directamente de una orden ejecutiva más amplia emitida durante el segundo mandato del presidente, que instruye a los Departamentos de Estado y del Tesoro a crear mecanismos financieros para desalentar las permanencias irregulares de visas.
También se alinea con una nueva “tarifa de integridad de visa” de $250 que muchos solicitantes ahora deben pagar. Estos requisitos financieros superpuestos envían un mensaje claro: el acceso a EE. UU. costará más y será más difícil de obtener.
Pero, ¿realmente esta política se trata de seguridad nacional? ¿O se trata de desalentar que ciertas poblaciones viajen aquí en absoluto?
El riesgo de permanencia irregular no siempre es lo que parece
Existe una narrativa creciente que dice que las permanencias irregulares de visas son motivadas por mala intención. Esa suposición es engañosa. Muchas personas exceden el tiempo de sus visas por razones fuera de su control. Enfermedad, vuelos retrasados, emergencias, lentitud burocrática o presentaciones legales tardías a menudo juegan un papel importante. En nuestra experiencia trabajando con clientes en Connecticut y a nivel nacional, la gran mayoría de quienes pierden su estatus nunca planearon violar la ley.
En muchos casos, estas personas hicieron esfuerzos para hacer lo correcto. Buscaron ayuda, intentaron solicitar una extensión o contactaron a USCIS para orientación. Pero debido a retrasos en el sistema, barreras de idioma o acceso legal limitado, cruzaron inadvertidamente una línea técnica.
A pesar de esto, el nuevo programa piloto de fianzas para visas trata a países enteros como de alto riesgo basándose solo en estadísticas de permanencia irregular. No hay espacio en este sistema para contexto, intención o circunstancias individuales. Todos los de esos países son agrupados. Eso incluye a personas mayores que visitan a sus hijos, padres que asisten a bodas y estudiantes en descansos cortos. Una política general ahora se usa para definir la confiabilidad de millones de personas.
Este tipo de generalización no refleja la complejidad real de la inmigración y no contribuye a construir confianza ni responsabilidad en nuestro sistema migratorio. En The Law Offices of James A. Welcome, creemos que la ley de inmigración debe ser precisa, justa y basada en el debido proceso, no en generalizaciones amplias que tratan a cada viajero de un país señalado con sospecha.
La discreción es un arma de doble filo
Uno de los aspectos más preocupantes del programa piloto de fianzas para visas es la discreción ampliada que ahora se otorga a los oficiales consulares de EE. UU. Aunque cierta flexibilidad en la aplicación de la ley migratoria es normal, esta nueva política abre la puerta a inconsistencias significativas. Bajo las reglas actuales, los oficiales consulares pueden elegir imponer una fianza o no, basándose en una variedad de factores vagamente definidos. El monto de la fianza también puede variar, desde $5,000 hasta $15,000.
Eso plantea preguntas serias. ¿Qué directrices siguen estos oficiales? ¿Cómo se garantizará la equidad? ¿Se tratará de manera diferente a solicitantes en situaciones similares dependiendo de la embajada que visiten o del oficial asignado a su caso?
Como abogados con más de dos décadas de experiencia representando inmigrantes, hemos visto de primera mano cómo la discreción vaga a menudo conduce a confusión, decisiones desiguales y estrés emocional para las familias. Sin un proceso claro de apelación o supervisión, muchos solicitantes pueden sentir que no tienen otra opción que pagar lo que se les pide, retrasar indefinidamente sus planes de viaje o renunciar a visitar a su familia por completo.
Los riesgos de este tipo de discreción no son solo teóricos. La inconsistencia genera incertidumbre, y la incertidumbre puede hacer que las familias retrasen visitas importantes, pierdan oportunidades de negocio o no cumplan con plazos migratorios críticos por miedo a ser blanco.
Creemos que las decisiones sobre visas deben guiarse por la transparencia y la equidad. El sistema migratorio debe estar basado en la ley y apoyado por salvaguardas procesales adecuadas, no dictado por conjeturas o generalizaciones amplias.
Esto no se trata solo de una política
El Programa Piloto de Fianzas para Visas es parte de una tendencia más amplia. Con la Ley One Big Beautiful Bill financiando miles de millones en recursos de aplicación, nuevas operaciones de ICE expandiéndose en el interior y aumentos de tarifas ya en marcha, estamos viendo que la inmigración se vuelve más punitiva, más costosa y más exclusiva.
Ya sea una visa de visitante o un permiso de trabajo, ninguna solicitud debe tomarse a la ligera en este clima. Un error menor, una presentación tardía o un documento faltante podría resultar en una negación, un encuentro con ICE o algo peor.
¿Qué debe hacer ahora?
Pregúntese:
- ¿Un familiar planea solicitar una visa B-1/B-2 desde un país con problemas previos de permanencia irregular?
- ¿Ha recibido avisos recientes o solicitudes de evidencia adicional (RFE) de USCIS?
- ¿Su visa o estatus legal ha expirado o está próximo a expirar?
- ¿Tiene un plan de emergencia si un ser querido es detenido?
Si la respuesta a cualquiera de estas preguntas es sí, o si no está seguro, ahora es el momento de hablar con un profesional legal.
Cómo podemos ayudar
En The Law Offices of James A. Welcome, ayudamos a inmigrantes y sus familias a navegar el cambiante panorama de la ley migratoria. Nuestro equipo tiene más de dos décadas de experiencia asistiendo a personas con problemas de visas, defensa contra deportación y ajuste de estatus. Hablamos inglés, español y portugués, y atendemos clientes en todo Connecticut y en todo el país.
Si usted o alguien que conoce puede verse afectado por el nuevo Programa Piloto de Fianzas para Visas u otras iniciativas de aplicación, llámenos hoy al (203) 753-7300 o visite www.welcomelawfirm.com para programar una consulta confidencial.