En el sistema judicial de los Estados Unidos, hay muchas buenas razones por las cuales un caso judicial puede necesitar un retraso o aplazamiento. Aparentemente, un juez de inmigración de Atlanta, Georgia, no considera que el parto sea una razón aceptable para que un abogado solicite una nueva fecha de audiencia. Stacy Ehrisman-Mickle es una abogada de inmigración que aceptó llevar el caso de dos niños que intentan obtener estatus legal en los EE. UU. Ehrisman-Mickle aceptó el caso sabiendo que la fecha de la audiencia caería durante su licencia de maternidad. En el pasado, nunca había tenido problemas con ningún juez que negara sus mociones de aplazamiento.
La abogada con sede en Atlanta presentó su moción, pero cuando fue sorprendentemente denegada por el juez (Juez J. Dan Pelletier Sr.), Ehrisman-Mickle tuvo que idear un nuevo plan. Con su esposo ausente y el resto de su familia no disponible para cuidar a su recién nacido, decidió llevar al bebé de 4 semanas a la corte con ella. Bajo órdenes del médico, mantuvo al bebé firmemente sujeto a su pecho. Desafortunadamente, durante la audiencia, el bebé comenzó a llorar y el juez Pelletier la reprendió severamente.
Stacy Ehrisman-Mickle mostró una gran dedicación y apoyo a sus clientes a pesar de que su vida personal estaba un poco caótica en ese momento. Muchos abogados no tienen este grado de diligencia y respeto por sus clientes. Aquí en las Oficinas Legales de James A. Welcome, reconocemos a aquellos abogados que muestran un compromiso con el trabajo duro y la dedicación sin importar cuán grande o pequeño sea el caso.
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